miércoles, 27 de mayo de 2009

Cierra los ojos y acomodate en una posicion comoda (preferentemente no acostado) y relajate tomando varias respiraciones profundas. Si no estás acostumbrado a estar sentado con las piernas cruzadas, te recomiendo que lo hagas apoyado contra una pared (así tu espalda no se cansa). Si no puedes meditar sentado en el suelo, lo mejor es sentarse e una silla con respaldo, que te permita tener los pies bien apoyados en el suelo. Los brazos están relajados, generalmente apoyados en las piernas o con las manos enlazadas frente al estómago.

0 comentarios: